Fundosa Social Consulting de Castilla –La Mancha junto con la Escuela universitaria de Magisteriohan organizado las primeras Jornadas Universitarias de la Discapacidad en Toledo.
Europa necesita personas más cualificadas y con una formación actualizada, así de contundente se ha mostrado el Parlamento Europeo 
(PE) en una sesión mantenida ayer en la que se aprobó un texto no legislativo, que recoge diversas recomendaciones, como el impulso de la formación en nuevas tecnologías, la movilidad, el aprendizaje a lo largo de toda la vida, la adaptación del contenido educativo al mercado laboral y abordar la exclusión del sistema educativo.
En el informe, aprobado por el Comité de Educación y Cultural del PE, los europarlamentarios instan a los Estados miembros a invertir más en el sistema educativo "como uno de los requisitos esenciales para salir de la crisis", y recomiendan que al menos el 40% de la población de entre 30 y 34 años dispongan de una educación universitaria, señala la institución europea en nota de prensa.
Como punto de partida, la eurocámara considera que, tendiendo en cuenta el entorno social en el que nos movemos, es necesario reforzar la formación digital y mediática y promover la enseñanza de las nuevas tecnologías en todos los niveles de la educación y formación. "Los niños deberían adquirir conocimientos informáticos desde una edad temprana y ser capaces de manejar Internet con un sentido de responsabilidad y discernimiento crítico", manifestaron los políticos.
Además, recomendaron a los veintisiete "modernizar sus agendas en materia de educación superior coordinando el contenido de la programación universitaria en función de las demandas del mercado laboral". Un ejemplo para impulsar esta actuación sería promover la formalización de convenios entre las instituciones universitarias y el mundo empresarial, y extender la formación a base de trabajos específicos y el aprendizaje.
Asimismo, para reforzar la movilidad de estudiantes y profesores, sería conveniente buscar una solución rápida al impedimento de estas actividades por potivos puramente económicos.
A este respecto, la eurocámara estipula que "la movilidad no será una realidad para las personas que no conocen un segundo idioma", por lo que instan a los Estados miembros a incluir en sus planes de estudios escolares una segunda lengua".
A la hora de abordar el aprendizaje continuado, los miembros del PE, recordaron que "las políticas de educación y formación deberían permitir a todos los ciudadanos, independientemente de su edad, género o situación socioeconómica, actualizar y desarrollar su formación y competencias adquiridas a lo largo de su vida".
Así, han respaldado el objetivo de elevar la participación adulta en la formación a lo largo de la vida del 12,5% al 15% hasta el año 2020, y apela a las universidades a "facilitar el acceso a este colectivo estableciendo programas que resulten atractivos y animen a los adultos a retomar sus estudios". El informe pide en este punto "el reconocimiento legal del derecho universal a la educación continuada".
Y como los estudiantes son los primeros en sentir las consecuencias de las gestiones legales adoptadas, también deben ser los primeros en dar su opinión al respecto. Por ello, los europarlamentarios creen que "todo sistema educativo debería impulsar la adquisición de competencias democráticas mediante el apoyo a los consejos estudiantiles y permitir a los estudiantes ser partícipes y coresponsables para la educación".
A este respecto, recomiendan "consultas más regulares y una mayor participación de los estudiantes en la gestión del proceso educativo, intervención de los familiares en la comunidad educativa y el desarrollo de unas relaciones basadas en la confianza entre estudiantes y profesores".
La cámara europea también estima que debe reconocerse y certificarse la formación adquirida, aunque no sea oficial, ya que ésta no deja de ser una educación complementaria.
En el terreno del analfabetismo, desempleo y exclusión social, los eurodiputados piden a los Estados miembros "más atención al número creciente de personas con bajo nivel formativo", mostrando su preocupación por el cada vez más alto nivel de desempleo juvenil". Por esto, piden el "establecimiento de un mercado laboral lo más flexible posible", con el fin de permitir a estos jóvenes compatibilizar un empleo con una formación sin tener que abandonar esta última".
Considerando que "la educación es básica para prevenir los prejuicios y la discriminación", recuerdan que la educación debe ser inclusiva para los niños inmigrantes, y recomienda adoptar las medidas necesarias para facilitar la adaptación formativa, social y linguística propias del país de acogida.
En este apartado, la eurocámara se hace eco de un balance sobre la baja presencia de mujeres en la educación superior en las ramas de matemáticas, ciencias y tecnología, en el que sólo hay un 32% de graduadas. "Se requiere un mayor esfuerzo para asegurar la igualdad de acceso en todos los niveles educativos y que la elección formativa no esté predeterminada por los estereotipos de género.
Nathalie Domínguez
